terapeuta

Por Andrés




-¿En dónde estay? 
-En el local de XXXX XXXXX.
-Dale, voy para allá. 

 Por el pasillo que lleva al estacionamiento iba caminando yo con una chaqueta mostaza muy estilosa, pitillos azul marinos y mis Doc. Martens aún duras que me hacen sonar como una vaca, con mi mochila verde paco, un café hirviéndome la mano izquierda y en la derecha mi celular con el que le preguntaba a mi vieja en dónde mierda estaba. 
 Me subí al jeep, puse el vaso plástico de café sin ningún agregado más que café en el portavasos y me dirigí a donde estaba mi mamá.

 -Ven, vamos al patio a fumarnos un pucho.
 -No, no gracias, ya no fumo de día.
 -¿Y que no querías tener una voz FM y esas cosas?
 -Sí, pero ya no me gusta el olor a cigarro en mi ropa. Ahora solo fumo cuando carreteo.
 -Entonces prende la cafetera y tomémonos un café, ya no quiero fumar.

 Más que por comodidad, prefiero el café soluble porque es el sabor continuo del café, de ese café que te sirven en los desayunos más lais o en los locales más rascas. Pero mi mamá en la oficina tiene una cafetera bastante sofisticada y varias bolsas de café Lucaffé que compra al por mayor en su otro trabajo porque a ella le gusta el café y en parte se gana la vida con el café. Pero a mí solo me gusta el café hirviendo sin ningún agregado más que café. 

 -¿A qué se debe tu visita, Andrés? si no pudiste esperarme a que llegara a la casa de seguro debe ser algo importante, o plata... necesitas plata ¿cierto? sí, necesitas plata, pásame la cartera.
 -No, en realidad no necesito plata. Osea sí, en parte es plata lo que necesito, pero no es plata para comprarme algo, es que quiero ir a un médico.
 -¿Te pasó algo? ¿dejaste embarazada a alguien no es cierto?
 -No mamá no, déjame hablar porfavor. Quiero ir al médico porque tengo un problema, bueno en realidad depende de donde se le mire, pero creo que es problema.
 -Hijo dime, qué te pasa.
 -No sé si te quiero decir, osea estas son cosas que no debería decirte y un problema que no deberías saber.
 -Antes que todo está la mamá, siempre sabes eso. La mamá nunca te juzgará, los amigos sí. 
 -Sí sé, lo tengo claro, pero estas cosas no son como para hablarlo con "la mamá", pero necesito de ti.
 -Entonces dime, hombre, dime!
 -Tengo un problema sexual, creo que soy ninfómano. 
 -Espera... ninfomanía es la adicción al sexo, que es distinto al onanismo. ¿Andrés hijo, tú no eres virgen?
 -Que nunca me hayas pillado tirando con una mina no significa que no lo haga, mamá por favor, también tengo privacidad. 
 -Ay hijo sí, lo sé... ¿pero tú? es que no me lo imagino de ti.
 -Es que no deberías imaginártelo, no seas cochina. 
 -Bueno ya, si te entendí si te entendí, cálmate. Entonces quieres ir a un médico para que te enseñe a...
 -¡NO MAMÁ! DE VERDAD CREES QUE SOY TAN HUASO?
 -Ay hijo si no es por eso, es que yo no sé para qué quieres ir a un médico.
 -Quiero ir a un médico porque esto se me está yendo de las manos, esto ya se ha vuelto una rutina y pronto voy a cagar brígido.
 -Entonces quieres ir a un psiquiatra... no querrás pasarte por algo para que te den pastillas con receta? 
 -Mamá, si de verdad quisiera tomar pastillas es cosa de ir a tu cartera y robarte una caja todas las noches... ¿No te has puesto a pensar que también le podría robar a la Rosario una receta de su escritorio y ponerla a mi nombre?
 -Entonces ya tienes visto al médico, ¿o no?
 -No, no sé todavía. Quiero ir particular, no por la Isapre, no tengo ganas que el viejo se entere. 
 -Si no quieres no se enterará. Toma, ahí tienes la tarjeta, pero aún sigo sin creerte, hijo quizás lo tuyo sea pasajero, es normal que a tu edad...
 -Sí mamá, sé lo que es normal a mi edad...
 -Ya cálmate, te arrugarás la cara. 
 -Te la devuelvo en la casa, me quiero ir.

 Era ya algo tarde como para ir a buscar un psiquiatra por ahí, pero tenía la tarjeta de mi mamá y me sentía poderoso. Cuando era chico tenía un espíritu de destrucción muy grande que ahora viejo no comprendo: agarraba los gatos y le daba cosas incomibles a la fuerza. Ya no maltrato gatos, pero vez que puedo me desquito con la tarjeta de mi mamá, así que estaba cerca de un mall y entré al mall y quise comprar algún perfume. De nada me sirvió entrar al mall, de nada me sirvió andar de bonito y a la moda por la vida, solo atiné a irme a un cajero, sacar 40 lucas e irme de vuelta al auto (al que dejé estacionado afuera, no adentro del mall, siempre me lo rayan).

 Pensaba que quizás debería haberme devuelto a la casa y empezar a buscar en la Publiguía psiquiatras, o a algún psicólogo, porque según muchos el psicólogo es mejor, pero es que el psiquiatra da pastillas y a parte es médico, pero el psicólogo es más como un partner.
 Iba cruzando la calle cuando por mi izquierda intersectándome venía caminando hacia mí por la otra vereda el Cristóbal (se acuerdan del Cristóbal?). Venía con el pelo mojado, con su ropa de interno del hospital, con un bolso deportivo y una mochila porta notebook. Venía con una expresión cachonda, recién salido del Sportlife y yo lo miro y me hago el desconocido y aprieto los dientes y camino rápido y paso casi intersectándolo.  Me subí rápido al auto, le pasé $150 pesos al cuidador y me fui, mientras pasaba por la calle lo vi a él sentado en el paradero esperando micro. Hasta el año pasado ese weón tenía un auto del año, quizás ya no lo tiene porque lo chocó. Esas son cosas que no me interesan.

 Camino a casa manejé, manejé pensando en todos los médicos con los que tiré, en todos los psicólogos con los que follé. Aún sigo siendo el deseo perdurable de un psicólogo joven algo obeso y hediondo que trabaja en Valpo en el SENAME. Aún me acuerdo de aquella orgía en donde éramos cuatro, uno era un destacado psicólogo con pinta de árabe. El weón tenía los ojos desorbitados, estaba con la pálida y tenía dos Viagras en el cuerpo, vomitaba sangre y hacía escándalo en el baño mientras tomábamos y fumábamos yerba en el living de un departamento viejo. Aún me acuerdo de Michael, de Cristóbal, de Ricardo, del director del banco de sangre de X establecimiento y así siguiendo la lista, personas a las que le pagas para que te digan que no debes hacer ciertas cosas y que ellos la terminan haciendo igual. 

 ¿De qué mierda me sirve ir a un terapeuta si sé bien que hacen la misma weá que yo? Y digo LO SÉ BIEN porque he tirado con varios. 

13 comentarios:

  1. Andrew, compensa tu adicción al sexo con otra adicción, ese es mi sabio consejo

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  2. - tu mama que es loca xd media weona, con todo cariño.
    -Si, los medicos son medios rariwis, tambien he tirado con ellos.
    - cuatica la wea de la orgia :s

    Saludos!<3 un fans

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  3. Pero es distinto compadre, porque no se trata de que te restrinjas, necesariamente, más bien es sobre canalizar. Mi humilde opinión.Un abrazo mijo, a veces hay que pensar menos.

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  4. Andrés...

    Cualquier terapeuta te puede ayudar, pero no debe ser mujer y menos cola, debe ser un wn hetero derecho de mente abierta, así como es mi Psicólogo y mi Siquiatra.
    Entonces analizarán tu vida que no es perfecta y buscarán la causa y la atacarán, lamentablemente estos procesos son largos dependiendo del caso, las angustias y manías hacen más difícil la solución
    ¿Te angustias?
    ¿Te angustia estar solo?
    Y lo peor ¿Tiene que ver todo esto con algún tipo de carencia afectiva por parte de tu Padre? Muchos gays, bisex caen en esto por trancas con los padres, padres proveedores que sólo se preocupan de entregar bienestar económico y social pero en lo afectivo no están presentes.


    Todo lo anterior ayuda a generar este tipo de conductas, la figura paterna se supone que es formadora, te orienta y dice que es bueno o malo, cuando falta quedamos cojos.

    En fin, éxito y recuerda. Las putas nunca se rehabilitan, no te vuelvas puta y creo que puedes lograrlo.

    --
    Yo. Juanito Fulanito

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  5. Según mi experiencia, puedo decir que prácticamente todos los miembros de cualquier equipo de salud, se escapan a lo que uno podría definir como 'sanidad mental'. Dejando eso de lado, a veces sociabilizar los problemas (y tener que pagar por ello) sirve para clarificar las cosas, ordenar un poco las ideas. Eso junto con algo de medicación podría calmar la ansiedad por sexo (?).
    Ya nos contarás que resuelves.
    Un saludo.

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  6. opino lo mismo que tu respecto al cafe, no entiendo la gente que los ahoga en azucar, el cafe se supone debe ser amargo, sld2z

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  7. Lo de la orgía me hizo recordar a un profe mío de Psicología Social en la U. También tiene pinta de áraba, de hecho, tiene un nombre bastante árabe.
    Por lo demás, creo que es hora de tomar control. No se te ocurra dejar el sexo, que es hermoso :B Pero calmar las pasiones te llevará a disfrutar más de el sexo con otras personas. Mi humirrrde opinión.

    Ex CaraDeTorta

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  8. Ah! Lo olvidaba, pasen por mi blog :) Y comenten para saber si algun pelagato me lee jajaja

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  9. Weón cada vez que te leo, es como leer Mala Onda, pero en una versión alternativa
    Eres mi Matías Vicuña <3

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  10. el café se supone que debe ser rico, ergo, con azucar. y los terapeutas da lo mismo lo que hagan, eso no les quita el conocimiento de como tratar y ayudar a quitar conductas obsesivas a la gente, ademas no todos con estilos de vida reventados son necesariamente adictos o gente que se les va de la mano

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  11. Andres, pucha que lata, apoyate en el blog nomas por mientras, no todos son asi, o por ultimo habla con nosotros, yo nada nada aun asi que aqui te puedo dar algunos consejos, cuidate ahora si! atte tu fan

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  12. puta, habia escrito caleta y se borro....

    yo pase por lo mismo(la wea terapia de grupo) hace un rato, y luego de acostarme con medio santiago, decidi ir al psicologo para parar (luego de pegarme mi primera infeccion), y fue lo mejor, para mi al menos.

    yo no se cual es tu problema, ni porque no estas conforme con tu sexualidad (al menos eso parece), solo se que si no eres feliz ya es suficiente motivo para consultar. aun cuando a la primera te puede tocar un weon chanta, prueba con un par antes de quedarte con uno definitivo.

    y da lo mismo que te toque un psicologo que se acueste con todo el mundo, que eso no tiene nada de malo ni perverso, solo es malo cuando tu no estas conforme con ello.

    dije puras weas pero espero haberte ayudado en algo

    Max

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  13. Andrés, como decía la persona anterior, no importa la vida privada del sicólogo, lo importante es que ellos tienen un saber técnico que puede ayudarte. Tampoco te solucionará la vida, un sicólogo en general solo te hará preguntas y te hará verte a ti mismo de una mejor manera, solo eso y de esa manera podrás encontrar respuestas a tus inquietudes. Siempre es uno mismo el mejor sanador. Trata de evitar los medicamentos como antidepresivos y esas cosas, ya que solo aliviarán un síntoma, pero no te sanarán, tal vez te hagan sentir un poco mejor en un corto plazo, pero no en el largo plazo y además envenenarán tu cuerpo.
    También te recomiendo probar cosas alternativas como el yoga y también someterte a algunas sesiones de reiki. Eso es lo mejor. Saludos!

    Febo.

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