colon irritable

Por Andrés






 -Wena.
 -Weeena, ¿con quién hablo?
 -Conmigo po, con el Pepe. 
 -¿Qué Pepe?
 -¿NO TE ACORDAI DE MÍ?
 -No, no sé quién eres.
 -Me diste tu Whatsapp la otra vez, soy del Manhunt.
 -Ah wena! ¿Qué contay? ¿qué perfil erí?
 -Elbonobo1675
 -Jajaja dale, pero la dura no me acuerdo de ti.
 -Si te acordai, tú me mostraste las fotos tuyas en pelota, manso pico que te gastai.
 -Jajaja gracias, pero todavía no me acuerdo de tí.
 -Soy el de tu edad po, te mostré unas fotos mías que me saqué en el baño, acuérdate po.
 -No, la dura que no.
 -Acuérdate po, el flaquito que tiene el culito cerradito. El que le gusta Metallica, ¿no te acordai? me diste tu Whatsapp pa que te agregara. Oye, ¿tay ocupado?
 -Un poco, en realidad ahora voy manejando para mi casa y te estoy hablando por el Bluetooth del auto.
 -Oye po, toy solito, te estoy esperando. Ven y me metí el pico rico po, yo te presto el poto.
 -Jajajaj prestar el poto suena súper cuma jajaja ¿pero la dura querí que te vaya a meter el pene a tu casa?
 -Sí weón, mis viejos están en la pega y toy solito, ven a culearme po, te la chupo rico y me haces tuyo.
 -Suena rico, pero la dura que no puedo, la dura que no. 
 -Ven po, ven y culeamos rico, me metí el pico así en el culito y me das duro, yo te dejo, la hacemos piola.
 -La dura que tengo la feroz erección ahora y estoy manejando como las weas de lo caliente que me dejaste, pero de verdad que no puedo.
 -Te tengo ganas, la tení super rica, ven y te la chupo y te vay, si quiero tirar contigo porque erí piola po, aparte somos de la misma edad. Ven po, ven y nos comimos.
 -¿A qué hora llegan tus viejos?
 -En una hora más.
 -Sorry perro, no puedo, dejémosla pa después.

 18:45 de un jueves, escuchar su voz gangosa, juvenil, calentona y zorrona fue una prueba a mi voluntad. Sabía bien quién era Elbonobo1675: un weón de 19 años que en el perfil del Manhunt tenía unas fotos de él sin polera, flaco flaco, buen culo, lampiño y en otras fotos con una muñequera negra de Motorhead en uno de sus brazos mientras se metía los dedos en el culo. Me tenía caliente. Si me llamó fue porque de verdad estaba caliente, quizás estaba en puro buzo y sin polera, tirado en su cama  mientras veía Los Simpsons y se pasaba los dedos por la nariz oliéndose el pico. Me imaginaba la escena mientras manejaba rumbo a mi casa, me lo imaginaba a él caliente y aromático, a él en pelota y yo metiéndole todo lo que Dios me dió, pero también pensé que de las pistas me había salido y que ya nada volvería a ser como antes. Con mucha dificultad traté de rechazar aquella oportunidad de un buen polvo, le dije que no podía pero no le dije que sí quería. Llegué a la casa, no había nadie, me masturbé como nunca y me tomé una cerveza al seco, de pura rabia.

 Llegó el viernes y luego de masturbarme toda la tarde frente al computador viendo porno, en la noche salí por ahí con mis amigos a carretear y a fumar hierba: he reemplazado el sexo con marihuana que en parte es igual de placentero. En la mañana siguiente me desperté con un fuerte dolor al pecho, pensé que me iba a morir pero no dije nada porque el carrete seguía, y en la tarde me fui con mis amigos a vagar a la playa a seguir fumando marihuana. En la noche me quedé en la casa, me masturbé, una cerveza y un pito y a dormir. Domingo por la mañana el dolor al pecho no me dejaba respirar tranquilo, pero aún así no dije nada porque o si no mi vieja diría que era por culpa del carrete y no me dejaría salir en meses. El lunes no podía más del dolor, le pedí a mi vieja que me llevara a la clínica. Llegamos, un médico en la urgencia me midió la presión y me auscultó el pecho, me dijo que no tenía nada grave y me derivó a un especialista en medicina interna de la misma clínica. A las 12 de la tarde del lunes tenía mi diagnóstico listo: colon irritable. 

 -Ándate a la casa, tómate estas gotas que te receté, descansa y no te alteres.
 -No puedo, el jueves tengo prueba.
 -Bueno, la prueba es el jueves, tómate estas gotas y de aquí al jueves estarás mejor.

 Mientras íbamos de vuelta a la casa, a mi vieja le sonó el teléfono. Ella manejaba, de su cartera agarré el celular, le puse el altavoz y sonó la voz de mi viejo. La saludó como si fueran grandes amigos, le dijo que estaba enfermo, que tenía neumonía y que le habían dado tres semanas de reposo.

 -Poncho, ¿qué mierda vas a hacer en Santiago? vente por estos días a Viña y te cuido bien.
 -¿De verdad me cuidarías estos días? 
 -Sí, ven y te cuidamos.
 -Y el Andrés, ¿qué dirá él?
 -Estoy acá, papá, estoy bien gracias por preguntar, ven nomás si al fin y al cabo la casa es tuya.

 El médico me dijo claramente que tenía que descansar y no alterarme, pero estaría mi viejo en la casa, y eso se veía venir: sería pelea diaria segura.
 Llegó ayer martes mientras estaba en clases, cuando llegué a la casa solo escuché su voz hablando con otro tipo, seguro que del trabajo. Me dolía mucho la guata, subí a mi pieza, me encerré en el baño y no pude cagar nada, solo sufrimiento, dolor y tensión en el costado izquierdo, como si de pronto todo iba a explotar.
 Se hizo la noche, bajé a comer algo, ahí me lo encontré de frente en la cocina. 
 -Hola hijo, cómo estás.
 -Mal, me duele la guata.
 -Si me contó la Pilar, te haz tomado las gotas.
 -Sí, pero no me han hecho efecto. ¿Tú cómo estás?
 -Me duele mucho la espalda, pero muero de ganas de fumarme un pucho. ¿Por qué no habías bajado
a saludarme?
 -Tengo prueba el jueves, he estado todos estos días estudiando.
 -Que lata, tómate algo caliente y ándate a dormir. 
 -No puedo, tengo que seguir estudiando.

 Ayer en la noche estudié hasta las 5 de la mañana. Sobreviví toda la noche dopándome con Viadil y Doloverina, pero aún así me dolía mucho la guata.
 En la mañana amanecí sin ganas, no fui a clases y almorcé como pude. Estuve toda la tarde estudiando y capeando el dolor con un guatero. En parte me propuse no despegarme del escritorio para no toparme con mi viejo, pero aún así subió muchas veces a verme.
 A eso de las 8 bajé a tomarme un té caliente. En la cocina estaba mi viejo en bata, tomándose un jugo de zanahoria y naranja mientras revisaba unos papeles. 

 -¿Cómo te sientes?
 -Mal, me duele mucho la guata.
 -¿Y no le pediste licencia al doctor?
 -Me dijo que con las gotas me mejoraría, pero sigo igual.
 -Lo que tú tienes es psicosomático, por más que te tomes esas pastillas no mejorarás, deberías haberle pedido una licencia al weón.
 -Si sé, pero la prueba es mañana y de verdad ya no puedo, pero tampoco tengo ganas de seguir estudiando.
 -Espérate un rato, siéntate conmigo y tómate una cerveza por mí, que yo no puedo hacerlo.
 -Pero la cerveza me hará peor.
 -Hazme caso, tómate una cerveza y relájate.

De su bolsillo agarró su celular, marcó un número y conversó con un weón entre medio de puras carcajadas.

 -Mauricio te llamo para pedirte un favor, el Andrés está súper lateado con una prueba y más encima tiene el cólon irritable. No tiene licencia y tampoco puede pedirle una a la hermana porque como son familia quizás no se la aceptarán en la universidad.

 Al rato después, después de varias carcajadas más, mi viejo cortó el celular y me dijo que estaba todo solucionado, que tenía una licencia hasta el lunes.

 -Relájate weón, llévate unas cervezas para la pieza y descansa. No tienes nada más que nervios, tú descansa, olvídate de todo, de seguro ya has estudiado todo lo que tenías que estudiar. Duerme tranquilo, mañana te voy a pasar unas lucas para que salgas a tomarte algo por ahí, olvídate de todo y el martes das la prueba.
 -Pero ¿y la universidad?
 -Da lo mismo la universidad, mañana vendrá tu hermana a quedarse unos días con nosotros, también vendrá el Nico, estaremos todos juntos como familia.
 -¿De verdad?
 -De verdad, y no le hagas caso a tu mamá con esa weá de tomar Flores de Bach y no comer comida rica, tú haz de cuenta que hoy comienza el fin de semana.
 -Entonces me estás dando permiso para carretear.
 -No te estoy dando permiso, te estoy exigiendo que lo hagas. Estás muy chico pa llenarte de problemas, tú solo dedícate a pasarla bien.

 En ese momento no sé si fue de inercia o de puro cariño, pero lo abracé un buen rato. Del refrigerador saqué unas cervezas heladas, guardé los libros y los cuadernos y me encerré en el escritorio con un espejo, unas cervezas y unos puchos a sacarme los puntos negros. En este minuto tengo la cara llena de una crema exfoliante que en un rato más me enjuagaré.

 ¿Y si de pronto todo vuelve a ser mejor que antes? Quizás me hacía falta hace rato tener a mi viejo en la casa. Sí, debo reconocer que lo extrañaba, suena raro después de todo lo que pensé de él, pero ni yo me convenzo que de verdad me hacía falta.

6 comentarios:

  1. Viejos... Padres,,, Progenitores,,, esos seres que por su ausencia o presencia exagerada nos causas males. Creo que el colon es como ese CSM que te dice que algo no anda bien, y si puedes arreglar las cosas con Padre aprovecha. Qué mejor que una vida familiar la raja? y si Él pone de su parte hazlo Tu también.
    Lo otro, si el cuerpo pide, dale! No en exceso, quizás la abstinencia sexual te tiene así, a mi me tiene irritado...

    Un abrazo...

    --
    Juanito Fulanito

    ResponderEliminar
  2. Me suena el nombre de perfil, susodicho. La parte de 'bonobo', aunque no logro recordar sus fotos... De noche todos los gatos son negros, dicen por ahí.
    Relájate, para que te sientas mejor.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
  3. Socio, como buen "drogadicto": Pa' la próxima, Dolospam o Tensoliv. El primero es sin receta, el otro sí, porque es psicotrópico.
    He sufrido ene veces de dolor intestinal y el médico que te vio es un soberano hueón, porque el Viadil es para dolor estomacal.
    Y mis felicitaciones por calmar el pilín en llamas!

    Un abrazo.

    Gatuno.

    ResponderEliminar
  4. De partida no te vas a sanar nunca si tomas los medicamentos con cerveza, te hará peor...
    Y segundo, no te dejes engañar, los padres siempre tratan de comprarte, los hace sentir mejor, aunque ellos saben de que no soluciona nada porque lo único que hacen es evadir el problema. Si de verdad quieres terminar con toda la mierda, hazte escuchar!
    No me convence de que quieras cambiar, aunque fue un buen paso el rechazar al niño ese, pero el problema no esta en el sexo, esta con tus padres, el Estrés que tu familia provoca en tu vida, te lo digo porque también me pasó, la marihuana, el copete, el carrete destructor no te sirve de nada, es mas tu rutina de fumar, carretiar, como que se vuelve monótoma o no??
    Concéntrate en otra cosa, por ejemplo, tus estudios, suena ñoño pero, ¿no te quieras ir a otro país? Chile no es nada en comparación con lo que hay allá fuera, gánate una beca si tu papá no te quiere pagar y recorre lo que no has recorrido aún.
    Porque tus papás ya no tengan como solucionarlo no quiere decir que lo tuyo está perdido...
    Empieza de a poco... lo digo como un concejo, si quiere tómalo, si no, bueno, ya tu sabes que harás...
    Saludos, Daniel :)

    ResponderEliminar
  5. Woww que fuerza de voluntad!! vas bien Andres ojala puedas cumplir con tu promesa jaja, todo mejora, relajate, diviertete y cuenta historias en el blos lei esta tambien porque soy tu fan jajaja, todo bien saludos cuidate, tu fan :)

    ResponderEliminar
  6. Andres comence hoy a leer tu blog, me encantas esas aventuras que te calientan y esos comentarios que te hacen reir
    Por cuenta propia +sexo -droga

    ResponderEliminar